Un total de 6 mil 637 hectáreas de los estados de Chiapas, Guerrero, Jalisco, Michoacán de Ocampo, Oaxaca, Quintana Roo, Sinaloa, Tamaulipas y Yucatán fueron decretados como Áreas Naturales Protegidas con la categoría de santuarios según el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) a finales del año pasado.
El objetivo fue proteger las zonas de anidación y reproducción de las tortugas marinas bajo esquemas que garanticen la preservación de sus elementos naturales y de los servicios ambientales que proporcionan.
El proceso de modificación incluyó el ajuste a los nombres de algunos santuarios conforme a la denominación reconocida por las comunidades locales y al análisis técnico realizado por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp); así mismo, se realizaron los ajustes necesarios a los polígonos que conformarán estas nuevas Áreas Naturales Protegidas y que incluirán superficies de anidación que no contaban con protección, así como zonas en buen estado para el desarrollo y conservación de estos quelonios.
Así que a partir de la publicación las 17 Áreas Naturales Protegidas recibirán nuevas denominación y dimensiones, por ejemplo, la Playa Rancho Nuevo en Tamaulipas, cuenta con una superficie de mil 843 hectáreas; la Playa Ría Lagartos en Yucatán consta de 827 hectáreas; las Playas de Isla Contoy en Quintana Roo abarcan 11 hectáreas; Playa Ceuta en Sinaloa consta de 503 hectáreas; y la Playa Huizzache Caimanero en Sinaloa, abarca 541 hectáreas.
En Jalisco las zonas que sufrieron modificación fueron la Playa Mismaloya que ahora abarca 810 hectáreas; la Playa Teopa que cuenta con casi 31 hectáreas; la Playa Cuitzmala con 21 hectáreas; y la Playa El Tecuán con 52 hectáreas.
En Michoacán la Playa Colola, quedó con 77 hectáreas; la Playa Maruata con 14 hectareas; y la Playa Mexiquillo con 100.
En Guerrero las Playa Piedra de Tlacoyunque y Tierra Colorada también fueron contempladas dentro del decreto, quedando con 99 y 263 hec´tareas respectivamente.
Además, se mencionan las Playas Chacahua y Escobilla de Oaxaca con 545 hectáreas 263 hectáreas respectivamente; y la Playa Puerto Arista de Chiapas con 726 hectáreas.
A estos santuarios llegan para anidar las tortugas marinas: golfina (Lepidochelys olivacea), laúd (Dermochelys coriacea), carey (Eretmochelys imbricata), verde -también conocida como blanca y en el Pacifico como negra o prieta- (Chelonia mydas), caguama (Caretta caretta) y lora (Lepidochelys kempii).
La relevancia de las playas de anidación de las tortugas marinas se debe a que en ellas se lleva a cabo su fase de reproducción, cuando las hembras salen a depositar sus huevos en nidos construidos en la arena para su incubación, donde si todo marcha bien, en un periodo de 45 a 60 días las crías nacen para dirigirse al mar y formar parte de la nueva generación de quelonios marinos.
Imagen de Peter Maas CC BY-SA 2.5
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