Si leyó usted bien, ya es una realidad la construcción de viviendas con botellas de plástico o el denominado PET (polietileno teraftalato), a poco más de un año de comenzar el proyecto VIEM MX se han entregado 4 casas, son 3 en proceso de construcción y 15 viviendas en planeación.
Esta idea surgió bajo el nombre de “Viviendas Emergentes (VIEM MX)” tras la pérdida de hogares de muchas familias mexicanas afectadas por los sismos del 7 y 19 de septiembre del 2017 en nuestro país.
Esta idea nace en la ciudad de Querétaro por un grupo de jovénes mexicanos preocupados por la situación que atravesaba el país tras los temblores, el cual esparce rápidamente a la Ciudad de México por un esfuerzo en conjunto de jovenes de diferentes disciplinas (arquitectos, ingenieros, comunicadores) que no se conocían pero que deseaban ayudar a los miles de damnificados,
Habían transcurrido solo unos días de los sismos, cinco para ser exactos, cuando el 22 de septiembre del 2017, comenzaron a recolectar botellas de PET en Querétaro y en la CDMX, simultáneamente, tomando la idea de construir usando este material al ver la cantidad producida en la Ciudad de México, por las millones de botellas de agua que se iban acumulando en la basura donadas por todos los rincones de México a los damnificados de esta gran urbe.
La iniciativa de “jóvenes quieren reconstruir casas con botellas de PET” creció exponencialmente en medios de comunicación y redes sociales, llegando a los oídos y al corazón de muchas personas de todo México y otros países, quienes aportaron botellas, transporte, comida, espacio en sus hogares, en sus trabajos para recolectar el PET, algunos apoyando monetariamente, otros como voluntarios, solo por el gusto de simplemente ayudar.
Hoy en día este grupo de jóvenes que forman VIEM MX siguen trabajando para lograr sus objetivos que es reconstruir los hogares de todas aquellas personas que los perdieron en dichos sismos. Actualmente para las 15 casas que tienen en planeación, VIEM MX aplicarán otra metodología que incluye capacitar a la población local para que ella misma sepa hacer “eco-construcciones”.
El objetivo de esta mueva modalidad es que la comunidad aprenda, que evolucione y replique este programa en otras comunidades bajo los conceptos de economía circular y economía solidaria, aprovechando al máximo muchos de los insumos que suelen consumir y tirar a la basura cuando éstos todavía tienen una segunda, tercera o hasta cuarta vida de uso.
Cabe recordar que en México, el uso de PET es uno de los más grandes del mundo: consume 9,000 millones de botellas al año (722 mil toneladas). El país es líder en reciclaje de PET en América Latina,con cifras de hasta 50.4%, pero se debe en buena medida al alto nivel de ingesta de refresco y agua embotellada en plásticos. En el 2014, un mexicano promedio consumió 234 litros de agua, lo que se calcula que generó hasta 21 millones de envases de PET.
Según la ONU, 8 millones de toneladas de plásticos terminan cada año en mares y océanos, el equivalente a la descarga de un camión de basura cada minuto. Una botella de PET tarda hasta 500 años en descomponerse, de acuerdo con Greenpeace, por lo que es urgente comenzar a tomar medidas para no continuar generando más este producto y reutilizarlo en la medida de lo que se pueda para otros fines diferente a los que fue creado.
Si deseas apoyar esta causa, puedes visitar su portal https://viemmx.org/ o al https://m.facebook.com/viem.mx/?_rdr
Por REDACCIÓN.
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