Especialistas en dilema por el tema del sargazo

Mientras se debate de dónde saldrán los 50 millones de dólares que se requieren para la contención y recolección del sargazo en altamar, lo que hace que cualquier aprovechamiento industrializado sea poco rentable –el problema no radica en el destino final, sino en los elevados costos de extracción–,30 por ciento de arrecifes y pastos marinos del Caribe mexicano se han afectado y perdido por la llegada de talofita a las playas.

El biólogo Enrique Gálvez García, de la asociación civil Biodiversidad y Desarrollo Rural, señaló que el problema no es el destino final, sino en los elevados costos de extracción del sargazo, lo que hace que cualquier estrategia para procesarlo sólo sea un paliativo: “Pueden hacer ensayos con mucho dinero, pero no han podido atenuar el problema y va para largo”.

Norma Patricia Muñoz Sevilla, investigadora del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y presidenta del Consejo de Cambio Climático, lamentó que aún no haya un proyecto definido e integral, y sostuvo que los mexicanos actuamos de botepronto por después de tres años de la llegada del alga, no hay un proyecto, mucho menos uno integral y ya definido.

“Y qué hicimos: sacarlo, enterrarlo, mandarlo al manglar, mandarlo en camiones a otro sitio, pero no resolvemos el problema. Como el 16 no llegó y el 17 muy poco, dijimos ya no vuelve, y no hicimos un proyecto integral, que es lo que hoy México tiene que hacer; somos de respuesta a botepronto; nos agarran los problemas y no tenemos planeación a largo tiempo.”

Carlos Gosselin Maurel, ex presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, evocó el Protocolo de Puerto Morelos, que lleva con gran precisión el tema del sargazo; dijo que el año pasado arribaron al undécimo municipio 754 mil metros cúbicos, en 18 kilómetros, y estimó que este año llegarán a lo largo del litoral estatal 24 millones de metros cúbicos.

“En un número general, sí pensamos que podrían andar en el rango, en un estimado general que puede ser muy cambiante, de 24 millones de metros cúbicos; qué significa 24 millones de metros cúbicos, significan tres mil canchas de futbol, para tener una idea y un dimensionamiento, piense en tres mil canchas de futbol con un metro de altura de sargazo.”

DN-III

Roberto Cintrón Gómez, actual dirigente de la hotelería organizada de Cancún, sostuvo por su parte que se requiere mucho dinero para la limpieza, la recolección y contención del vegetal, y añadió que una declaratoria de emergencia nacional, lo único que provocaría es que el programa DN-III entre en función y libere muy pocos recursos.

“A ciencia cierta cuánto se necesita, te puedo decir cuánto pagamos de nuestros hoteles; yo te puedo decir que en estos // seis mil metros // de playas nosotros estamos pagando alrededor de cinco millones de pesos mensuales; son alrededor de 18 kilómetros lo que se tiene de playas en Puerto Morelos, pero no todas se limpian, solamente las partes turísticas.”

Alfredo Arellano Guillermo, secretario de Ecología y Medio Ambiente, habló, en tanto, de al menos ocho opciones de uso y aprovechamiento de la ova, como crear biodiesel, la industria de la construcción en vivienda rural, los cosméticos, fertilizantes y el calor para la producción de energía, hay que hallar la que tenga mayor rentabilidad, e incluso garantizó las vacaciones de Semana Santa.

“Siempre, con esos temas hay un grado de incertidumbre fuerte, pero por lo mismo, estamos preparados para atender y asegurar que el turismo tendrá calidad en las playas, y calidad en su visita // Estamos prevenidos con actividades y acciones de gobierno, y esperando también la promesa que hizo el presidente en atender y apoyar el tema el sargazo.”

Finalmente Alejandro Bravo Quezada, consultor en Oceanografía para el grupo Goimar, afirmó que la llegada de talofita a las costas del Caribe mexicano es apenas la punta del iceberg de las consecuencias del cambio climático global, y no se sabe qué tanto va a cambiar el ecosistema; es un pequeño ejemplo de lo que ya hemos ocasionado al mar, que ya sobrepasó el límite de carga de contaminantes y la está regresando.

“Difícilmente vamos a dejar de contaminar el mar en poco tiempo, y revertir el daño que hemos ocasionado durante siglos, no va a ser en el corto plazo // Tenemos que aprender, tenemos que salvar la costa de Quintana Roo, tenemos que salvar el arrecife, tenemos que salvar a la población que vive del turismo; no es pensar si estamos, lo tenemos que hacer.”

El biólogo acusó que nunca, hasta ahora, se quiso escuchar a los científicos pese a lo que se gasta en investigación para no oírlos; es gente que está en sus cubículos estudiando constantemente, pero no se les escucha, no se toma en cuenta su opinión cuando son reamente quienes están entendiendo al ecosistema y los cambios que hay en el planeta.

Por Carlos Aguila / @aguila_carlin