Siguen plásticos saturando océanos, playas y costas

Las botellas y bolsas de plásticos son los residuos que con mayor regularidad se recogen en las limpiezas de playas, por lo que en el marco del día Internacional de las Playas, Ocean Conservancy hace un llamado a realizar cambios fundamentales en la relación de la humanidad con el plástico.

De acuerdo a datos recopilados por la organización desde 1986, muchos de los artículos catalogados por los voluntarios del International Coastal Cleanup (ICC) tienen poco o ningún valor económico después de su uso, por lo que la organización internacional hizo un llamado a que se creen mecanismos políticos para aumentar el valor del plástico para incentivar su recolección, reciclaje y reutilización.

“Obligar el uso de contenido de plástico reciclado posconsumo en nuevos productos también ayudaría a crear una demanda en el mercado de inversiones en infraestructura de reciclaje, desvío de residuos plásticos de vertederos o incineración y reducción de la necesidad de resina plástica virgen nueva”, afirma Ocean Conservacy.

El estudio de la Organización, arrojó patrones interesantes como el hecho de que las colillas de cigarrillos son casi siempre el artículo ICC más común, pero sólo en países desarrollados como los EE. UU., Canadá y el sur de Europa.

Por el contrario, las botellas de plástico son más comunes en los trópicos, donde los costos y la logística en las naciones insulares pueden limitar la infraestructura de recolección y reciclaje de desechos en comparación con otras áreas.

“Con largas costas en relación con el área terrestre, estas regiones a menudo ven un aumento de la contaminación plástica que fluye hacia el mar durante la temporada de lluvias”, afirma Ocean Conservacy.

El estudio también señaló que las bolsas de plástico fueron más comunes en América Central y del Sur, África y el sur y sudeste de Asia, mientras que las envolturas de alimentos fueron más comunes en Filipinas, donde se ubicaron cinco de los 10 principales puntos de acceso para este artículo.

“Estas conclusiones científicas son consistentes con nuestra experiencia en el terreno durante la última década, donde hemos visto de primera mano que artículos como envoltorios de alimentos y envases de bolsitas de una sola porción, sin valor de mercado posconsumo, se eliminan en grandes cantidades sin suficiente infraestructura de gestión de residuos”, afirman.

El organismo señaló que como alternativa, también se debe reducir la producción y el uso general de plástico prohibiendo o evitando aquellos productos y materiales sin los que simplemente podemos vivir.

“Los gobiernos nacionales y locales deben promover políticas que aceleren este tipo de enfoques y garantizar que la industria del plástico asuma una mayor responsabilidad por los plásticos de los que se benefician, como la Ley Break Free from Plastic Pollution que se está considerando en los EE. UU.. Los datos de International Coastal Cleanup y Dive Against Debris, y el tipo de análisis en nuestra nueva publicación, pueden actuar como una línea de base para monitorear la efectividad de estas y otras intervenciones políticas”, señalan.

El documento es producto de una colaboración entre Ocean Conservancy, la Fundación PADI AWARE y los científicos de CSIRO y que se resume en un primer mapa mundial de puntos críticos de plástico, publicada en la revista Global Environmental Change.

La investigación combinó información de 22 mil 508 limpiezas de playas y costas de ICC en 116 países entre 2011 y 2017 con 7 mil 290 limpiezas submarinas PADI AWARE en 118 países entre 2011 y 2018.

Imagen Thomas Wolter en Pixabay