Pitahaya o Pitaya: mas que una “h” de diferencia

Suenan igual pero se escriben diferente, y aunque solemos confundir estos frutos tienen mas diferencias que la “h” muda de en medio.

Pocos son los que no las han confundido, y no es para menos, además de que ambas se pronuncian igual, tanto la pitaya como la pitahaya se consideran exóticas, se cultivan tanto como plantas ornamentales como para la recolección del fruto y generan flores hermosas.

Otra cosa en común es que ambas se cultivan en la región tropical del continente americano y perteneces a la familia de las Cactáceas.

Además, la pitaya y la pitahaya contienen propiedades nutrimentales en contenido de vitaminas C, B, potasio, hierro, calcio y fósforo, además de ser bajas en calorías y de ayudar a la digestión por ser ricas en fibra.

Su principal diferencia radica en el género al que pertenecen. La pitaya proviene del género Stenocereus, mientras que la pitahaya es del Hylocereus y de ahí parten otras diferencias.

La Pitahaya

Aún cuando proviene de un cactus, la pitahaya carece de espinas y su flor es la más grande de todas las cactáceas.

Imagen de Rogério Pritzke Pritzke/Pixabay

La palabra pitahaya es de origen antillano y significa “fruta escamosa”, su fruto es de forma ovoide, redondeado y alargado, de pulpa roja, blanca o amarilla y de semillas pequeñas negras y su sabor es menos dulce que el de la pitaya.

El hábito de crecimiento de la pitahaya es trepador por lo que internacionalmente se le conoce como fruta del dragón o Thanh Long, como se le llama en Vietnam, esto se debe a que la planta que la produce trepa sobre los troncos de los árboles y se entrelaza dando la forma al cuerpo de un dragón, animal mitológico muy popular en Asia, principalmente en China.

La Pitaya

El nombre de la pitaya se le da a la frutas que están cubiertas de espinas; su fruto es ovoide semiredondeado, de pulpa blanca, roja, amarilla, morada, rojo-violeta y de gran cantidad de semillas negras (al igual que la pitahaya).