La familia, base de la sociedad siendo una estructura que al paso del tiempo se ha ido moldeando. Y de ahí es que también surgen modelos de negocios que deben surcar retos para lograr la consolidación de ambas.
Tuve la oportunidad de conversar con el Dr. en Comunicación y Desarrollo: Tito Galarza sobre empresas familiares, sus retos y consolidación. Él es coach en Programación Neurolingüística, consultor en conducción de familias, docente de universidad, ponente internacional en temas de motivación, liderazgo, talento, ética en el trabajo, comportamiento organizacional, relaciones humanas, familias exitosas, entre otros.
Primeramente, el Dr. Galarza, habla de que la familia en sí es una empresa, ya que en ella se planifica la vida en común, se requiere de la organización de los integrantes, la correlación como equipo, toma de decisiones y el aprendizaje continuo. Además, es indispensable el compromiso de todas las partes, se en ella se vive el liderazgo.
La dicotomía al crear una “empresa familiar”, no es tarea sencilla pues produce inestabilidad en los resultados. ¿Cómo gestionar una estructura de familia en una “empresa familiar” ?, la propia estructura organizacional padre-hija, madre-jefe, sobrino-empleado, por mencionar algunos casos, se verá influenciada desde los valores aprendidos y fortalezas de cada uno de los integrantes, no olvidando que; “se es, familia antes que empresa”. La familia forma a las personas y derivado de ello, será su comportamiento en el ámbito laboral.
Los negocios familiares parten en ocasiones desde la propia pareja que inicia o bien una herencia, por ejemplo. Es una de las formas más conocidas desde el emprendedurismo. Delimitar la relación afectiva de lo que es un trabajo, es una labor compleja ya que se puede llegar a deteriorar el trato y el vínculo afectivo.
Los principios básicos administrativos se aplican perfectamente en casa. En la organización debemos estructurar las responsabilidades de los integrantes para lograr el producto o servicio que resuelve una necesidad social. En casa ocurre exactamente lo mismo.
El resultado de una buena integración familiar creará personas felices, realizadas, que impactarán a la sociedad positivamente y propiciarán negocios sostenibles. El bienestar, la realización de cada uno de los integrantes, saber como se motiva a cada miembro del equipo, cual importante es su trabajo y la manera correcta de efectuarlo; permitirá lograr los objetivos deseados.
Tan importante es que la coalición rectora, sea ejemplo de realización para no crear un ambiente tóxico. Así que debemos reconocer que: “la familia: es la empresa más importante del mundo”, dice el Dr. Galarza.
¿Tienes alguna experiencia con algún negocio familiar? ¡Cuéntame!
Por Marletza