Cenotes del Caribe Mexicano: guardianes de memorias sumergidas de la Era del Hielo

Uno de los mayores atractivos del Caribe Mexicano son sin duda sus cenotes y ríos submarinos conectados en un complejo sistema acuático bajo tierra y que esconden no sólo tesoros naturales, sino parte de la historia de la humanidad.

Estas cavernas sumergidas han sido testigos de hechos y actividades humanas que ubican al hombre en la región desde la Era del Hielo cuando el nivel del mar se encontraba de 40 a 100 metros debajo del nivel actual.

Una de las historias que mayor luz han arrojado sobre esta época, es la de Naia, una joven mujer de entre 15 y 17 años que hace 12 mil 970 años perdió la vida en la cueva que hoy conocemos como el Hoyo Negro y que está ubicada en el municipio de Tulúm.

De constitución física pequeña, apenas de un metro y medio de altura y unos 50 kilos de peso, Naia, que ya había sido madre, se encontraba caminando en esta oscura caverna, quizá explorando o buscando agua.

Según los arqueológos, Naia pudo haber perdido su antorcha, y en la oscuridad, haber tropezado y caído a un pozo de más de 20 mts de profundidad fracturándose la pelvis y otras partes del cuerpo, lo que causó su muerte.

Además de Naia, en Tulúm se han encontrado a otros personajes celebres de la Época de Hielo, uno de los más antiguos es la Eva de Naharon, que fue una mujer de 1.40 metros de altura con un peso aproximado de 53 kilos, y que se cree que al momento de su muerte, hace 13 mil 600 años, podría haber tenido entre 25 y 30 años.

Eva fue hallada en 2002 por el explorador y arqueólogo subacuático Octavio Del Río en las cavernas de Tulum.

El trio de mujeres prehistóricas se completa con Ixchel, “la mujer de las Palmas”, que representa la osamenta más antigua encontrada hasta ahora en la península de Yucatán, y que sostiene la hipótesis de que el continente americano no fue únicamente zona migrtoria, sino que efectivamente fue habitado por los humanos en la Era de Hielo.

La teoría de que la región fue habitada en la Era del Hielo se completa con los restos de Chan Hol, un joven que fue enterrado hace más de 10 mil años en una cueva; y por “el hombre del templo” que fue encontrado en Sac Actún, el mismo sistema de cuevas donde se encontró a Naia, ambos de más de 10 mil años de antiguedad.

El hallazgo de estos cuatro personajes, sumados a los cientos de restos que se han encontrado en la región, dan cuenta de la larga historia que encierra el Caribe y que se remonta mucho más allá de la colonización y la cultura maya.

Imagen de Jerónimo Avilés en Colnal.mx