Quintana Roo alberga un sin fin de recursos naturales poseedor de ecosistemas y atractivos que pueden asombrar a más de uno, incluso algunos se pueden observar desde la carretera, como es el caso del cenote Yumkin, ubicado en el municipio de Puerto Morelos, kilómetro 266 de la carretera Leona Vicario – Valladolid.
Leona Vicario
Leona Vicario es una de las poblaciones más antiguas de lo que hoy es el Municipio de Puerto Morelos, tuvo su origen en la Hacienda de Santa María, localizada donde hoy está la población moderna y que fue establecida al poco tiempo de la creación del Territorio Federal de Quintana Roo, en el año de 1902, la Hacienda de Santa María fue una concesión otorgada por el gobierno federal al Banco de Londres y México para la explotación del chicle y el palo de tinte, el auge de la producción chiclera atrajo población de varias partes del país, sobre todo de estados del centro como Guanajuato y del sureste como Oaxaca.
El establecimiento inicial de la población fue difícil debido a las condiciones climatológicas y al hecho de que muchos grupos mayas aún se encontraban en rebeldía tras la Guerra de Castas y atacaban los campamentos chicleros matando a los trabajadores, considerando que los estaban despojando de sus tierras ancestrales, sin embargo, varios de estos grupos mayas depusieron las armas a raíz del establecimiento de la hacienda y algunos se establecieron en ella como trabajadores de la misma.
Yumkin
El cenote Yumkin se encuentra en una propiedad privada en la que es muy fácil acceder, pues está abierto al público y lo mejor de todo es que está equipado con cabañas bastante acogedoras y asadores para preparar tus propios alimentos, lo mejor de todo es la armonía de la naturaleza que desde el primer instante se puede respirar y por supuesto relajará a cualquiera que llegue del bullicio de la ajetreada ciudad.
Un cuerpo de agua completamente abierto y con una profundidad que da la impresión de caer al abismo, pero eso no es para preocuparse porque siempre podemos recurrir a los chalecos salvavidas mientras nadamos o damos un paseo en kayak.
Las cabañas están equipadas con camas matrimoniales, aire acondicionado y mosquiteros, las hay para todas las necesidades, incluso cuentan con instalaciones familiares o solo para parejas, según lo que busquen los visitantes.
Sin duda alguna un oasis para escapar del bullicio de las grandes ciudades, un lugar donde la naturaleza te absorberá para iniciar un proceso de relajación total.
Fotos de Emilio Cuevas
Este artículo fue publicado originalmente en peregrineros.wordpress.com y se reproduce con permiso expreso de sus autores. Para leer el artículo original visite: https://peregrineros.wordpress.com/2022/06/16/cenote-yumkin-un-oasis-en-la-zona-chiclera-de-q-roo/