El tema financiero para muchos emprendedores en edad temprana e incluso para algunos ya avanzados en su negocio, es un gran reto en el que se derivan situaciones problemáticas por falta de entendimiento al decidir emprender. La educación financiera ineficiente en los países Latinoamericanos dicta la pauta desde el sistema educativo.
Hesy Landesbaum, asesora financiera, emprendedora, empoderadora de mujeres y creadora de la comunidad Hablando Entre Mujeres USA, compartió algunos conceptos básicos de finanzas. La organización es fundamental cuando de dinero se trata, de establecer presupuestos para cada concepto y reflejarlos en un plan de negocios será trascendental para conseguir una salud financiera adecuada.
El hábito del ahorro, saber nuestro capital y el buen manejo de un financiamiento (líneas-tarjetas de crédito), es fundamental.
Formalizar un negocio considerando desde un inicio que el emprendedor debe tener “un sueldo”, manejo de cuentas separadas, no gastar más de lo que se gana, tener un registro de ingresos y egresos, son algunos de los consejos que nos da Hesy Landesbaum.
Cuando se tiene un negocio, es importantísimo constituirlo en función de los socios inversionistas (si existieran), porcentaje de participaciones, conocimiento del sistema tributario y establecer un plan de sucesión (seguros de vida, retiro, testamento, transferencia de la propiedad, etc.). Además, saber que un fondo de emergencia es indispensable para poder enfrentar cualquier tipo de contratiempo. La sugerencia va de 3 a 6 meses, lo aconsejable; es un año.
Otros 2 factores que considerar para tener finanzas saludables son: la diversificación de un negocio la cual debe darse cuando ya este cimentado (equipo de trabajo definido, tener una línea de crédito, dominar el negocio actual, etc.) y en caso de querer reinvertir, el consejo es partir de doble dígito. Por último, una revisión trimestral ayudará a generar proyecciones en el negocio y medir los resultados.
Así que ya sabes querido emprendedor, las finanzas son el eje medular de un negocio.
Ahora hablemos de comida, ¿conoces Veracruz?, ¿qué sabes sobre la comida orizabeña?, ¿has probado alguna vez un pambazo? Junto a Susana Yescas y Sara Eslava de Proyectos con Identidad AC tuve la ocasión de conversar sobre Orizaba, ciudad en el centro del estado, en la región de las altas montañas. Fue tierra totonaca, tolteca, tlaxcalteca y mexica. Fue ahí, dónde en 1540 se realizó la primera siembra de caña de azúcar en América.
Su tierra húmeda y fértil provee gran cantidad de ingredientes como el maíz, chayote, café y gran variedad de hierbas: quelites, tlanepa (acuyo), hoja de aguacate, romero, ruda, entre otras para dar creación a un gran número de preparaciones: molotes, picadas, tripas de leche, chileatole, tesmole, tamales de frijol, carne de chito (carne seca, salada o enchilada), garnachas (tortilla frita con carne deshebrada) y fritangas (antojitos fritos), pan de burro, mole y su típico “pambazo orizabeño”; el rey de las fiestas y celebraciones. Ya sea en una merienda, bautizo, boda, cumpleaños, ¡no falta!
El pambazo es un pan blanco, suave, harinoso y con una punta simulando el Pico de Orizaba, se rellena de frijol cocido negro cocinado previamente con hoja de aguacate, hay quien añade chorizo o longaniza, pollo, arrachera, pata o pierna al pastor. Se complementa con lechuga, queso jarocho y salsa de chile chipotle o estilo “Macha” (típica pro todo el estado). Es tan reconocido y degustado, que existe en la ciudad; el Festival del Pambazo. Y para quien guste acompañarlo con una bebida tradicional, ahí están los “toritos” elaborados con aguardiente de caña, leche y alguna fruta como el nanche, guanábana o el clásico de cacahuate, nuez o hasta chayote. ¿Te imaginas?
Por último, hace unos días tuve la oportunidad de charlar con el chef Julián Martínez, originario de las Costas de Zihuatanejo en el estado de Guerrero. Propietario del restaurante Sepia Cucina Italiana en la CDMX y que recientemente ganó el reconocimiento de “Top Italian Restaurante 2022”. Él me contó su historia, cómo siendo niño aprendió a pescar con su Padre y que junto a su madre descubrió el proceso de la nixtamalización, el uso de los productos del campo y métodos de cocción tradicional. Siendo joven quería estudiar contabilidad, pero la responsabilidad de tener su propia familia, le llevo a trabajar a las cocinas.
Sus habilidades, conocimientos adquiridos y poco a poco el gusto por cocinar le hizo crecer en el sector gastronómico rápidamente, abriéndose paso en restaurantes distinguidos en la ciudad de Ixtapa Zihuatanejo, la CDMX y aprovechando la oportunidad de irse a Italia durante una época para aprender con algunos chefs reconocidos.
¡Es uno de los grandes!, su trabajo arduo, aspiraciones, su interés por conocer la materia prima, el haber sido pescador le llevó a incursionar en la cocina italiana en la que así como México, también se distribuyen sus sabores y preparaciones en 20 regiones, cada una con sus características gastronómicas propias, respeto por los ingredientes, sabores sutiles y únicos como el aceite de oliva, el tomate, las “hierbas de olor” como el romero, albahaca, salvia, el ajo y por supuesto, siendo Italia un país peninsular el uso de los pescados y mariscos por doquier.
El chef Martínez, orgulloso de sus orígenes, trabajador, perseverante, visionario y comprometido con la pesca sustentable, presenta una propuesta exquisita a través de sus risottos, pastas, panes, arroces, carpaccios, cocina de mar y variedad de carnes en un local perfectamente ambientado y que cuenta con una de las cavas más grandes del país (más de 300 etiquetas). Así que, si eres amante de la “cucina italiana”, no hay que perderse vivir la experiencia y de paso deleitarse con la calidez del chef.
Ya sabes que semana tras semana nos encontramos en este espacio, gracias por permitirme compartir contigo lo que a lo largo de los días voy aprendiendo de aficionados y profesionales de la gastronomía, cultura y emprendimiento.
Por Marletza