Peña y Santos “Tenemos retos similares en la lucha antinarco”

Bogotá. México y Colombia encaran problemas comunes, retos similares, por la actividad de bandas del crimen organizado y del narcotráfico que operan en ambos países, y esto les impone reforzar los acuerdos de colaboración y cooperación, admitieron los presidentes Enrique Peña Nieto y Juan Manuel Santos.

El mandatario mexicano realizó ayer una visita de Estados a Colombia, previa a su participación, a partir de hoy, en la 25 Cumbre de jefes de Estado de Iberoamérica.

México y Colombia encaran problemas comunes, retos similares, por la actividad de bandas del crimen organizado y del narcotráfico que operan en ambos países, y esto les impone reforzar los acuerdos de colaboración y cooperación, admitieron los presidentes Enrique Peña Nieto y Juan Manuel Santos.

El mandatario mexicano realizó ayer una visita de Estados a Colombia, previa a su participación, a partir de hoy, en la 25 Cumbre de jefes de Estado de Iberoamérica.

En esta ocasión, los dos temas preeminentes en las conversaciones privadas del Palacio de Nariño fueron cómo incrementar la cooperación en materia de seguridad y la ratificación del respaldo de México a los empeños de Colombia por sellar los acuerdos para poner fin al conflicto civil armado más antiguo del continente americano.

Se necesita ser valiente para buscar la paz, dijo Peña Nieto al definir la labor de Santos en este proceso, y refrendó la disposición de México para cooperar con un millón de dólares para las tareas de retiro de minas del territorio colombiano, así como mantener la participación de elementos mexicanos en la misión de seguimiento para la paz en Colombia, de la Organización de las Naciones Unidas.

En relación con los cárteles con presencia en los dos países, en un mensaje a medios de comunicación el presidente Santos precisó: ‘‘Hemos colaborado, hicimos un inventario (en el encuentro privado) de lo que hemos hecho, y podemos hacer mucho más con decisiones muy importantes en este frente contra la delincuencia trasnacional y el narcotráfico’’.

Colombia, comentó el mandatario, ha capacitado a 6 mil 500 integrantes de las fuerzas públicas mexicanas en áreas como antisecuestros y extorsión.

El presidente Peña Nieto dijo a su vez: ‘‘Tenemos una cooperación cotidiana, actualizada, minuto a minuto, precisamente para hacerle frente a los desafíos que enfrentamos ambas naciones en el combate a la inseguridad. Y hoy hemos hablado de extender esta cooperación a efecto de poder combatir con mayor eficacia al crimen organizado’’.

En esta cita una vez más fue notorio el vínculo entre ambos mandatarios, más allá de la formalidad del cargo. Se consideran amigos y a lo largo de su mandato se han encontrado numerosas veces. De hecho, terminarán gestiones apenas con unos meses de diferencia. Santos en agosto y Peña en diciembre de 2018.

Así, y luego del ceremonial protocolario de bienvenida en la Plaza de Armas de Nariño, acompañados por sus esposas, Peña Nieto y Santos trabajaron en privado y con sus comitivas. El mexicano estuvo apenas aquí a finales de septiembre, como parte de los invitados especiales para la firma de los acuerdos de paz entre el gobierno y la guerrilla. Éstos, sin embargo, recibieron el revés de la mayoría de los colombianos en el plebiscito del 2 de octubre.

Ayer, el titular del Ejecutivo mexicano alabó en el colombiano su ‘‘voluntad inquebrantable’’ por terminar con el conflicto armado y de nuevo lo felicitó por la obtención del Premio Nobel de la Paz este año.

‘‘Me alegro que Colombia tenga en su presidente a un líder decidido a avanzar en la búsqueda de consensos para poner fin a décadas de un conflicto armado. El propio referendo, destacó también, ‘‘acredita el avance democrático de la sociedad’’, y donde Colombia se erige como ejemplo de un país que respeta la decisión de sus mayorías.

Los colombianos, añadió Peña, ‘‘nos han enseñado que el futuro se construye con participación, respeto y tolerancia’’. Y reiteró su disposición de ayudar a este país para ‘‘concretar las vías que conduzcan a la paz duradera que merece esta nación’’.

Al principio del mensaje, el presidente Santos había anunciado su decisión de suspender el inicio de negociaciones en Ecuador con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), porque este grupo no cumplió con la condición de liberar al congresista Odín Sánchez.

Y sobre el proceso de paz negociado con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, reiteró que al día siguiente del resultado adverso de octubre ‘‘iniciamos el diálogo con todos los sectores para lograr lo más pronto posible un nuevo acuerdo’’.

En la exaltación a la labor y figura de Santos, el presidente Peña apuntó: ‘‘Para construir la paz también se requiere ser valiente. Se necesita una gran determinación para dejar atrás los senderos por los que ya no era posible avanzar más, para proponer nuevas rutas y nuevos acuerdos’’.

Por la tarde, Peña Nieto fue recibido en la alcaldía de Bogotá, donde el alcalde Enrique Peñalosa Londoño le entregó las llaves de la ciudad y lo declaró huésped ilustre. Peña Nieto reafirmó los propósitos de su visita de Estado de estrechar los lazos de amistad y fraternidad entre Colombia y México.

Peñalosa Londoño aseguró a su vez que los colombianos somos por definición ‘‘mexicanófilos’’. Enseguida y antes de volar a Cartagena de Indias, Peña se reunió con los presidentes de los poderes Legislativo y Judicial de Colombia.