No para la llegada de migrantes a Q.Roo; en 4 años vinieron 70 mil

 En los últimos cuatro años migraron a Quintana Roo para quedarse 70 mil personas; 70 por ciento vino sola, la mayoría de entre 18 y veintitantos años de edad, quienes una vez establecidos buscan pareja o la traen, empiezan a construir familia y eso representa presión para el crecimiento de los servicios, señaló Rocío Moreno Mendoza, titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso).
Adicionalmente, tenemos fenómenos como la colonia Chiapaneca, de gente que viene de otros estado, forma comunidades, se asienta, trae a su familia y eso nos da una multiculturalidad que debemos atender, explicó en entrevista para el noticiero matutino de Radio Fórmula.

Luego de Baja California Sur somos el Estado que más migrantes recibe y en los últimos años la tasa se mantiene negativa porque se quedan 6 cada 10 personas que llegan, es decir, sólo cuatro vuelven a salir. Todas esas personas que se quedan, demandan vivienda, servicios en vivienda, educación, salud, reveló.
Según dijo, todo eso dificulta a la Sedeso el combate a la pobreza y los esfuerzos para bajar los índices de desigualdad y dar mejores condiciones de vida a las personas que, por la vulnerabilidad o exclusión, tienen menos acceso a oportunidades.
El tema de la seguridad está muy ligado, continuó. Por eso, desde el gobierno del Estado  trabajamos en un modelo de prevención del desorden, la violencia y delincuencia, con la visión de desarrollar un trabajo más fuerte desde el ámbito del desarrollo social para prevenir los altos índices de violencia y delincuencia.
Estamos atacando factores de riesgo social, que son principalmente económicos y situacionales, sobre todo la pobreza en zonas urbanas y rurales, expuso.

La funcionaria destacó que, según las estadísticas, la mayor parte de las personas en situación de pobreza están en Cancún y Playa del Carmen, pues el crecimiento que reportan las ciudades atrae a que muchas personas de otros estados y del mismo Estado en busca de empleos que, afortunadamente, ofrecen tanto Cancún como Playa del Carmen.
La mayor parte de los migrantes son personas sin recursos económicos que vienen en busca de las oportunidades que no encontraron en sus lugares de origen, aseveró.
Por otra parte, señaló que la pobreza se mide, de acuerdo con el Consejo Nacional de Evaluación de la Política Social (Coneval) por dos condiciones: nivel de ingreso por debajo de la línea de pobreza, esto es, la cantidad de dinero que se requiere para comprar la canasta básica alimentaria y no alimentaria, es decir, los principales servicios.

Estamos hablando de un poco más de 4 mil pesos mensuales por persona adulta y de 11 mil cuando se habla de un hogar. La persona u hogar que no llega a ese ingreso se consideran en pobreza por ingreso, detalló.
Sin embargo, para que se catalogue como pobre tiene que cumplir la condición de tener una de seis carencias sociales: seguridad social, que es en la que estamos peor como estado; calidad en los espacios de vivienda, es decir, pisos, muros y techo firme; servicios en la vivienda, agua, electricidad, drenaje y, en el caso de Quintana Roo, que no tengan o no cocinen con fogones de leña, de los que se calcula que hay 55 mil hogares con esa condición en la zona maya; suficiente acceso a alimentos que te brinden una alimentación básica; salud y educación.
Si estás bajo la línea de pobreza por ingreso y tienes una o dos de esas carencias, te consideras en pobreza; si tienes tres o más, estás en pobreza extrema, continuó.
Una de las principales carencias es seguridad social, que abarca todas las prestaciones que da el empleo: jubilación, pensión, seguro de salud, posibilidad de acceso a guarderías, etc. En Quintana Roo, el 51% de las personas no tienen acceso a prestaciones sociales, subrayó.

En la medición nacional Quintana Roo se ubica en el lugar siete, tomando en cuenta que el 1 es Nuevo León, que es el que está en mejor condición, y el 32 es Chiapas.
Nuestra situación no es mala y eso se debe a que aquí hay empleo. Muchas personas tienen acceso a ingresos porque tienen uno, dos o hasta tres empleos. En lo que sí tenemos problema es en la variable de los servicios y la mayor parte de las personas que tienen esa carencia está en las ciudades.
En la zona maya hay más carencias y pobreza extrema, pero en número están en las ciudades y estamos trabajando en el abatimiento de las carencias sociales y en abrir oportunidades para el empleo y autoempleo, indicó.
Moreno Mendoza se refirió además a reciente estudio de la Cepal, que determinó que el ingreso es la variable que más pesa cuando uno tiene que romper el círculo de pobreza. El peso que tiene es el 74 por ciento. En consecuencia, se podría estar trabajando en abatir todas las carencias y aun así no se estaría rompiendo el círculo de la pobreza.
Lograr que las personas sean autogestivas, que tengan la posibilidad de generar ingresos durante todo su periodo de vida y que no estén dependiendo de subsidios de gobierno es el tema central para poder luchar contra la pobreza, manifestó.

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