Codrington Lagoon: un paraíso para las fragatas en Barbuda

La riqueza y diversidad del Caribe nunca deja de sorprendernos, y para muestra el paraíso de Codrington Lagoon, un santuario de aves en el corazón de Barbuda.

Se trata de la colonia más grande de fragatas del hemisferio occidental, que es el hogar temporal de alrededor de 5 mil aves fragatas, unas magníficas aves que año con año viajan entre las islas del Caribe y Galápagos durante las distintas temporadas de apareamiento.

Llegar a Codrington Lagoon es complicado pues sólo se puede acceder a mediante un corto viaje en barco con un guía turístico experto, pero vale la pena porque en este paraíso

las fragatas no están solas: se calcula que más de 170 especies de aves habitan aquí. Así, la población de aves en este lugar se estima en 100 mil aves.

La laguna es un ecosistema rico, compuesto por manglares, lechos de pastos marinos, mantos de algas, marismas y marismas, playas y arrecifes de coral, que además, sustentan una diversidad de especies marinas como langostas juveniles, peces de arrecife, tortugas marinas y mamíferos marinos.

La laguna es uno de los mayores activos económicos de la isla, ya que sustenta una próspera pesquería de langosta y un mercado turístico en expansión que se centra en gran medida en la colonia de anidación de aves fragatas.

Pero el aumento del nivel del mar y la intrusión de agua salada en los acuíferos ponen en riesgo este lugar desde 2006 se registró en la lista de sitios RAMSAR.

Actualmente, existen varios proyectos que buscan proteger y recuperación la laguna, es el caso del TMarine Ecosystems Protected Area Trust (MEPA) Trust para la restauración del manglar.

El proyecto busca proteger a la población de Barbuda mediante la replantación de manglares que servirían como protección contra las marejadas ciclónicas y proporcionarían un conjunto de servicios ecosistémicos por encima y por debajo del agua.