¡Me encantan las sobremesas!, los diversos significados y lo que se genera en ella cuando las compartimos.
En casa aprendí que uno no se levantaba de la mesa hasta que todos hubiéramos terminado de comer. Mientras eso ocurría las conversaciones fluían, conectábamos, contábamos sobre nosotros y e día a día. Cuando se trataba de “comidas familiares”, la visita a casa de los abuelos, el cumpleaños del primo, las celebraciones del fin de año… era inevitable seguir sentados a la mesa “escuchando”, compartiendo, reposando la acción propia del comer… ¡claro que también era espacio para el desfile interminable de postres y risas!
Con el pasar de los años y él ritmo frenético de la vida -trabajo, trabajo y más trabajo- revalorar esas “sobremesas” disfrutando del momento, la compañía y un buen postre son de lo mejor que uno puede atesorar. Algunos gustan de un digestivo y un cigarro para acompañar.
La Real Academia Española expone el concepto de sobremesa como “inmediatamente después de comer y sin levantarse de la mesa”. La sobremesa es una costumbre muy antigua que data de los emperadores romanos en que después de sus grandes banquetes, las burbujas (vino) se hacían presentes. Incluso para pasar a las expresiones artísticas como el canto, la poesía o la actuación.
Conversé con Bibi González, comunicóloga con postgrado en digital customer experience, locutora comercial, creadora y anfitriona de Plan Unplug (una propuesta para vivir una experiencia integral en cuanto a compartir conocimiento, generar networking, degustar comida rica y salir de la rutina: justamente sentándonos con calma para conversar y generar una linda sobremesa).
La sobremesa comienza con uno mismo (incluso cuando comemos solos), en ella se conversa de todo e incluso podemos decir que “pretendemos” resolver el mundo, se cuentan anécdotas de familia, se expresan sentimientos, opiniones, etc. Aunado a todo ello, importante es cuidar los detalles: un mantel, servilleta, flor e integración de elementos decorativos que generen una atmosfera acogedora aún cuando estemos con desconocidos.
Rescatemos la propuesta de hacer de las sobremesas, las protagonistas de los fines de semanas, celebraciones y si se puede del día a día ¡maravilloso! En ellas aprendemos, disfrutamos y sociabilizamos. Procuremos el hábito de experimentar este acto maravilloso (incluso si comemos solos) ¡démonos un tiempo para ello!
Por otro lado, te comparto que estuve conversando con la C.P. Karla Solís, con experiencia como analista contable fiscal, profesor universitario, egresada de la Escuela Bancaria y Comercial con maestría en impuestos. Actualmente contador independiente y coordinadora de Cocina Ancestral para un Nuevo Mundo, siendo un grupo de chefs, investigadores y personas interesadas en el sector gastronómico y la salvaguarda de las cocinas ancestrales.
La administración es la base para el desarrollo de nuestros proyectos y emprendimientos en que se involucran todo tipo de recursos. Justamente, coordinar los recursos nos llevará a conseguir resultados en nuestros emprendimientos o empresas.
¿Sabías que el primer emprendedor de la historia fue Cristóbal Colón?, anteriormente el conceto de emprender estaba ligado a realizar un viaje, para después pasar a la descripción de “una persona que decide hacer algo”. En el s. XVIII el concepto cobró el sentido de: “una persona que ofrece un producto recibiendo un pago por él”.
La importancia de la administración en los emprendimientos gastronómicos nos ayuda a: optimizar recursos, establecer ventajas competitivas, simplificar el trabajo, medir el desempeño, reducir costos, asegurar el crecimiento sostenible del proyecto, ser más productivos, etc.
La contadora Solís, compartió algunos ejemplos fundamentados en los pilares de la administración: Planeación, Organización, Dirección y Control. Estos tienen que ver con el sector gastronómico:
- Cuidar la calidad de los insumos
- Controlar los ingresos y egresos
- Costeo de recetas
- Automatización de procesos
- Aprovechamiento de los recursos
- Correcta gestión del inventario
- Medición del desempeño
¿Crees que existe alguna etapa más importante que otra para asegurar el éxito de nuestra propuesta? ¡Cuéntame!
Hasta aquí nuestra columna de hoy, nos leemos a la próxima.
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Por Marletza