El presidente Enrique Peña Nieto advirtió que revertir la reforma energética provocaría la cancelación de cuantiosas inversiones y que los mexicanos tuvieran que pagar millones de dólares para obtener la producción petrolera deseada para el país.
Sin mencionar su nombre, el mandatario criticó así a Andrés Manuel López Obrador, el candidato presidencial puntero en las encuestas y quien ha adelantado que modificaría la reforma energética en caso de ganar los comicios del 1 de julio.
“Quienes de manera fácil convocan a dar marcha atrás a la reforma energética francamente sería condenar a que nuestro país regrese a un modelo caduco, a un modelo obsoleto, a un modelo que ya no funciona en ninguna otra parte del mundo” dijo Peña Nieto el jueves en un evento en Veracruz.
“Cancelar la reforma energética es prácticamente condenar a la desaparición de las inversiones que hoy demandan certeza”, añadió el presidente, quien dejará el cargo el 1 de diciembre.
Al inaugurar el Centro de Tecnologías para Aguas Profundas del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), señaló que de perder las inversiones privadas que han llegado para la exploración y explotación del crudo, los mexicanos serán quienes deban hacer ese gasto millonario.
“Hoy se han comprometido ya inversiones hacia los próximos años del orden de 200,000 millones de dólares, que no se hubiesen comprometido, ni estuvieran hoy pactadas, ni contratadas, si no hubiese habido la reforma energética. Y que esos 200,000 y los 600,000 millones de dólares que demandará el poder reponer la producción petrolera que el país perdió en los próximos 15 años, la tengan que pagar los mexicanos”, aseguró Peña Nieto.
La reforma, que abrió toda la cadena de los hidrocarburos a la inversión nacional y extranjera y acabó con el monopolio de la estatal Pemex en el sector petrolero, requirió cambios a la Constitución, lo que hace complicado que se puedan realizar nuevas modificaciones, sostienen expertos.
Sin embargo, López Obrador dijo que se llevarían a cabo las modificaciones de las leyes energéticas aunque le “lleve tiempo”.
El veterano político, quien busca la presidencia por tercera ocasión consecutiva, ha dicho también que en caso de ser electo se revisarán todos los contratos petroleros y pediría a Peña Nieto que se detengan las subastas de contratos de crudo y gas programadas para después de los comicios.
Tras la apertura del sector energético, México ha realizado varias licitaciones de hidrocarburos y ha asignado más de 90 contratos en tierra y en aguas someras y profundas, con los que espera elevar la alicaída producción de crudo y gas en los próximos años.
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