La situación que enfrentan los prestadores de servicios turísticos en Playa del Carmen es alarmante, debido al masivo recale de sargazo que afecta la calidad de las playas y, en consecuencia, la actividad turística. Los informes indican que los turistas han comenzado a cancelar tours, especialmente aquellos que se realizan en Playa El Recodo, donde las embarcaciones están ancladas.
José Gómez Burgos, secretario de la cooperativa turística del Mar Caribe, expresó su preocupación por el impacto que esta situación está generando en el sector. Aseguró que un número significativo de turistas se muestra renuente a visitar la playa debido a la gran cantidad de sargazo descompuesto presente, así como a la dificultad que representa caminar a lo largo de la costa. “Hemos tenido alrededor de cuatro o cinco cancelaciones (…) es muy complicado operar en condiciones tan inestables. La orilla está dañada, lo que impide que las personas puedan acceder y subir a las embarcaciones”, comentó Gómez Burgos, según Sipse.
Adicionalmente, destacó que las embarcaciones que realizan recorridos de pesca deportiva enfrentan el riesgo de daño en sus motores debido al paso del sargazo, que puede colapsar las transmisiones. “Esto genera costos adicionales por reparaciones”, indicó el secretario.
A pesar del esfuerzo continuo por parte de trabajadores de la Dirección de Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) para limpiar la macroalga, Playa del Carmen ha sido identificada como la zona más afectada, con cientos de toneladas de sargazo llegando diariamente. La crisis no se limita solo a Playa del Carmen; también las playas de Tulum y Puerto Morelos están experimentando niveles críticos de acumulación de sargazo, dificultando tanto el acceso de los turistas como el desarrollo de actividades turísticas.
Finalmente, Roberto Ucan, subdelegado de la zona, alertó sobre una mayor llegada de sargazo prevista para julio, enfatizando que en Isla María Elena está ocurriendo el mayor recale de esta macroalga, lo que limita aún más las operaciones turísticas en la región. La situación exige atención inmediata para mitigar sus efectos y restaurar la afluencia turística.