Grupo Vidanta elige invertir en cruceros y no en el Tren Maya

Pese a que su participación había sido confirmada por el gobierno federal, el fundador del Grupo Vidanta anunció que no participará en el proyecto del Tren Maya, y por lo tanto no se encargará de desarrollar las estaciones de lujo. El motivo: prefieren enfocarse en su línea de cruceros, otro segmento al que le apuestan.

Además, considera que debido a la gran demanda de empresas y consorcios que desean participar, no ven necesario involucrarse.

“Hay tanto interés de inversionistas que no lo vemos necesario; estamos muy involucrados ahora en el área de cruceros”, dijo el empresario Daniel Chávez Morán al periódico El Sol de México.

Sin embargo, ratifica su respaldo a la iniciativa, la cual, está seguro que durante sus primeros 10 años va a duplicar la actividad turística en el sur del país.

Se pronunció también sobre la petición de dinero para promoción.

“Qué mejor promoción que la estabilidad económica y la seguridad; si alcanzamos esas metas, que las vamos a alcanzar, la promoción se dará en automático, porque va a haber crecimiento, y este implica recursos que se pueden destinar a la promoción”, afirmó.

Concluyó manifestando su apoyo a las políticas turísticas del gobierno de López Obrador.

PAGARÁN A EJIDOS ANTES DEL INICIO DE OBRAS

Por su parte, Pablo Careaga Córdova, encargado del Tren Maya del tramo Tulum-Bacalar, dijo que la encomienda del gobierno es que, antes de iniciar cualquier obra, deben saldar las deudas con los ejidos, incluso las de administraciones pasadas, esto con el fin de evitar posteriores conflictos.

“Estamos resolviendo los temas pendientes, sobre todo los predios que no se indemnizaron. Si no los resolvemos, no podremos ganarnos la confianza de los ejidos”, explicó a El Economista el funcionario.

Serán la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y el Instituto de Administración y Avalúo de Bienes Nacionales (Indaabin) las dependencias encargadas de este proceso.

Hay problemas que se vienen arrastrando desde hace uno o dos sexenios, puntualizó.

Recalca que, aunque el 95% de la tierra donde pasará el tren es propiedad federal, aún hay que decidir dónde se asentarán la estaciones y los desarrollos que se planean alrededor de ellos, y ahí es donde las tierras ejidales serán importantes. Por ello quieren tener todo arreglado y saldado antes de negociar algo más, en este caso directamente por las obras del Tren Maya.

Concluyó reiterando que no habrá expropiaciones con el tren, sino pago de utilidades o renta a través del fideicomiso.

Por AGENCIA SIM