La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) reconoció esta semana a la Milpa Maya Sistema Importante del Patrimonio Agrícola Mundial (SIPAM)
También conocida como “Ich Kool”, la Milpa Maya Peninsular es un complejo sistema productivo biocultural que se desarrolla en los estados de Yucatán, Campeche y Quintana Roo, explicó el embajador Miguel García Winder, titular de la Misión Permanente, quien representó a México durante la entrega del reconocimiento.
Añadió que la Milpa Maya Peninsular ha evolucionado a lo largo del tiempo tomando en cuenta el delicado balance que existe en el territorio entre la biodiversidad, el clima, los recursos naturales y las necesidades de los productores, sus familias y sus comunidades.
Expresó que más allá de una estrategia de autoabasto y supervivencia familiar, también alberga la identidad, la historia, las tradiciones y cosmovisiones de toda una cultura, al tiempo que provee servicios ambientales propios en favor de las comunidades y la sociedad en general: desde la conservación de especies vegetales hasta la coexistencia con ecosistemas de alta biodiversidad.
En su mensaje, García Winder reconoció el trabajo que realizan día a día las milperas y milperos de la Milpa Maya, ya que son los que le dan vida a este sistema agrícola que hoy se reconoce formalmente como patrimonio agrícola de la humanidad.
El reconocimiento de la Milpa Maya de la Península de Yucatán como parte del patrimonio agrícola mundial es el resultado de un trabajo de organismos de diversos niveles de gobierno, expertos, académicos y, principalmente, de las maestras y maestros milperos, quienes a lo largo de siete años realizaron un extenso y minucioso trabajo para lograr este reconocimiento.
La entrega del reconocimiento se realizó en la sede de la FAO en Roma, y estuvo encabezada por, el director del organismo, Qu Dongyu.
El reconocimiento SIPAM de la FAO considera varios criteros, entre ellos, la contribución a la seguridad alimentaria y al sustento de las comunidades locales; la representación de diversos usos de la diversidad biológica en el territorio donde ocurren; el uso de conocimientos tradicionales de las comunidades locales y su papel en la preservación de la integridad del sistema agrícola y del paisaje.
Así mismo, observa que sean sistemas regulados por fuertes valores culturales y basados en formas colectivas de organización social y que se traduzcan en paisajes excepcionales derivados del manejo de los recursos de tierras y aguas.
A la fecha, la FAO ha reconocido 74 sitios de 24 países como patrimonio agrícola mundial.
La Milpa Maya Penínsular es el segundo sistema agrícola de México en recibir este reconocimiento por parte de la FAO luego de que en 2017 se otorgó la desginación al “Sistema de Chinampas” de la Ciudad de México.
