Entre septiembre y octubre del año pasado, ya con conocimiento de que el arribo de sargazo se extendería hasta fin de año, se advirtió a Andrés Manuel López Obrador, aún como presidente electo, que el sargazo era la amenaza más grande para el país porque no habría Tren Maya, ni Cancún, Playa del Carmen o Tulum, y que se perdería 10 por ciento del producto interno bruto (PIB).
El 13 de abril pasado, la titular de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Josefa González-Blanco Ortiz-Mena, anunció la creación de una comisión presidencial para el tratamiento del sargazo al salir de una reunión con autoridades de los tres niveles en el hotel Paraíso la Bonita, en bahía Petempich, municipio de Puerto Morelos.
En la misma reunión se dio a conocer que para enfrentar el quinto año consecutivo de recale masivo de la macroalga a las costas de Quintana Roo, se solicitarían mil 500 millones de pesos para capturar el vegetal en altamar y evitar que llegue al litoral, mediante un buque sargacero que maneje grandes cantidades, incluso con capacidad de procesarlo en el lugar.
Pablo Careaga Córdova, enlace territorial en el sur del “Tramo Caribe” del Tren Maya por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), Pablo Careaga Córdova, saludó la iniciativa al recordar que en charla con el entonces presidente electo le dijo que era un problema que afecta a los ecosistemas costeros y, por ende, la economía turística.
“Es la amenaza más grave que tiene el país en estos momentos, es un problema que tiene el potencial de acabar con casi el 10 por ciento del PIB (Producto Interno Bruto) que genera Quintana Roo por ingresos turísticos. Al señor presidente le dije que es el problema más grave que enfrenta el país; con sargazo no hay tren maya y no hay Cancún y no hay Playa del Carmen y no hay Tulum, y nos olvidamos del destino si no lo resolvemos.”
Consideró que el sargazo y sus afectaciones no han sido tan evidentes como un huracán o un terremoto pero tiene las mismas características y alcances devastadores que aquellos, o incluso peores por el costo que le puede representar a un país porque es ambiental, ecológico, económico y social.
“Es un problema tan grande, tan complejo y caro de resolver, que sí o sí se requiere el trabajo en equipo de todos los actores sociales: del gobierno, de la academia, de los empresarios y de la sociedad civil // cuando tenemos un enemigo en común los mexicanos, o una amenaza en común, nos unimos y todos trabajamos muy bien, somos reconocidos a nivel mundial.”
Una baja de unos cuantos puntos en la ocupación promedio anual por la presencia de talofita tendría una serie de impactos sociales como la inseguridad, violencia, homicidios, asaltos y demás; incluso, dijo que la amenaza es tal para el país, que es más seria que el narcotráfico, y en ese sentido dijo que la ejecución anticontingencia debe ser inmediata.
“No tenemos mucho tiempo para seguir haciendo mucha investigación, mucho análisis, qué opina una secretaría, qué opina la otra, no. Tenemos que ejecutar con lo que tenemos: no tenemos la información completa, no; no tenemos el recurso completo, tampoco; no tenemos consensos y acuerdos entre todos, tampoco, pero estamos en una situación de emergencia.”
Coordinación
El secretario de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), Alfredo Arellano Guillermo, coincidió en que no hay tiempo para una solución perfecta y consensuada, y la comisión presidencial es positiva. La idea es subirle de nivel al tema y generar la intersectorialidad que requiere su atención, también para la consecución y suma de recursos necesarios.
“La comisión presidencial permitirá asimismo fortalecer las iniciativas de cooperación técnica y financiera internacional, así como una mejor coordinación con el estado y los municipios afectados, en vísperas de la Cumbre del Sargazo, a la que asistirán 27 ministros y/o secretarios de Medio Ambiente o Turismo, el 28 de mayo al hotel Moon Palace.
En tanto, Darío Flota Ocampo, director del Consejo de Promoción Turística de Quintana Roo (CPTQ), dijo que es un gran avance que a nivel presidencial se enfrente la responsabilidad de participar en la solución del problema, y que también se trabaje de manera coordinada con el estado y los municipios.
“Ante un problema de la magnitud que tiene el arribo masivo del sargazo y los posibles impactos en la economía del principal destino turístico del país, es de reconocer el liderazgo para enfrentar la problemática por parte de esa comisión, y que cuente con el respaldo presidencial, así como del presupuesto necesario.”
Por CARLOS AGUILA/ @aguila_carlin
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