Por Carlos Aguila Arreola
@aguila_carlin
Media centena de trabajadores del hotel Emporio denunciaron “una serie de injusticias” como despidos injustificados, falta de pago de propinas y horas extra trabajadas, así como el maltrato de los jefes, de acuerdo con Noel Pinacho Santos, secretario del Interior de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC).
Empero, cuando se preguntó al ex regidor por qué algunos de los trabajadores declararon que no tenían sindicato, el líder croquista cantinfleó y no supo explicar por qué varios cuestionaron el supuesto apoyo del organismo sindical, pues dejaron entrever que los desconocía como afiliados pese a que cada quincena les descuentan la cuota respectiva.
La protesta, afuera del hotel Emporio Cancún (ex Royal Mayan), en el kilómetro 12.5 de la Zona Hotelera, fue ante la intención de los nuevos propietarios de asignar el contrato colectivo a otro sindicato.
Los empleados sostenían cartulinas en las que acusaban a la nueva administración de querer quedarse con la propina de los trabajadores, práctica que aseguran es común en las propiedades del grupo Diestra Hoteles, que maneja la marca Emporio.
“Han abierto 20 hoteles en el país y en todos tienen su forma de trabajar, de tener contratos con la Confederación de Trabajadores de México (CTM) o con sindicatos patito, porque no les gusta que entre otro organismo sindical”, aseguró Pinacho Santos.
El secretario del Interior de la CROC añadió que la cadena adquirió hace meses un hotel en Acapulco, donde también trataron de quitarles el contrato colectivo, lo que en su momento impidieron.
“En este momento está un emplazamiento a huelga porque al final no están respetando el contrato colectivo; se niegan a revisar las prestaciones; lo que vemos es que ayer despiden a dos trabajadores por solicitar el pago de las propinas y que el salario lo paguen a tiempo.”
“No les dieron ninguna explicación e incluso algunos jefes departamentales burlándose y diciéndoles que la lista era grande y que iban a despedir más trabajadores. No podemos permitirlo, a menos que la empresa entre en razón y dé su lugar al trabajador; lo que menos queremos es afectar al turismo, pero no podemos permitir que lo hagan con el trabajador.”
Pinacho Santos refirió que a los (dos) compañeros que dieron de baja ayer, la CROC los estará asesorando en sus demandas; el jurídico de la central obrera las va a encabezar hasta donde lleguen, porque no se permitirá el atropello a los trabajadores; la manifestación fue pacífica, pero si la empresa no entiende, se actuará hasta las últimas consecuencias.
También hubo discrepancia entre los trabajadores del hotel: mientras Noel Pinacho dijo que eran 350, uno de los manifestantes, el bell boy Erik Arenas García, señaló que eran alrededor de 550, de entrada 200 de diferencia, los que quizá no están contabilizados y protegidos por la CROC porque otro, Pedro Pablo Caamal, incluso mostró recibos de nómina donde sólo de leía la leyenda “sindicato”, pero sin especificar cuál.
El secretario del Interior de la CROC sostuvo que la manifestación se mantendrá el tiempo necesario porque la empresa tendrá que responder; de lo contrario, “los turistas que llegan se van a enterar de las injusticias que se cometen contra el trabajador que los atiende. Depende de la empresa cómo quiere que se lleve esto, pero una represalia más no la vamos a permitir”.
Empero, una trabajadora, Cecilia Gutiérrez, dijo que estaban buscando apoyo de la CROC porque “ayer (lunes) me mandaron llamar y me dijeron que daban por terminada mi labor con la empresa, prácticamente tenían todos mis documentos y me sentí obligada a firmar; no me dieron ninguna razón, sólo me dijeron que era por una reestructuración de personal”.
Agregó que tenía dos años laborando en el área de Banquetes del hotel Emporio, y que el 48 por ciento que supuestamente se destinaban para el pago de propinas, lo utilizaban para pagar a los otros meseros, y “los gerentes prefieren mandar a sus capitanes a decirnos las cosas cuando ellos son los obligados, como tendría que ser”.