Caminos del Mayab

Electorado, parte de la solución a los problemas

La mayoría de las veces, los ciudadanos nos quejamos del actuar de los gobiernos en turno, nada nos acomoda, casi nadie cuestiona a los diputados (federales y estatales) y mucho menos al Poder Judicial, el actuar de los que imparten justicia; comúnmente siempre hablamos de lo mal que gobierna el Presidente de la República, el Gobernador del Estado o el Presidente Municipal.

Ahora tendremos otra oportunidad para poder elegir a quienes se encargarán de la administración pública, de la creación de leyes y de los que ejercerán el presupuesto público los próximos tres o seis años.

En ese contexto, será el próximo domingo 2 de junio cuando se realizará la jornada electoral en los estados de Aguascalientes, Baja California, Durango, Quintana Roo y Tamaulipas, además del proceso extraordinario de Puebla, cuya gobernadora murió en diciembre pasado.

Según el Instituto Nacional Electoral (INE), en Aguascalientes se elegirán 11 ayuntamientos solamente. En Baja California el proceso será para elegir gobernador, 25 diputados (17 de mayoría relativa y 8 de representación proporcional), además de cinco ayuntamientos. Mientras que, en Durango, el proceso electoral será para la elección de 39 ayuntamientos. Para Tamaulipas, el proceso es para elegir a 36 diputados locales (22 de mayoría relativa y 14 de representación proporcional). En tanto, en Puebla se realizará proceso electoral extraordinario para elegir nuevo gobernador.

Aquí en Quintana Roo se realizarán comicios para elegir 25 diputados locales (15 de mayoría relativa y 10 de representación proporcional). Podrán participar más de un millón 200 mil electores, que si el 70 por ciento de ellos asistieran a las urnas, las cosas fueran diferentes, pero la apatía y la indiferencia dejan la decisión en mano de los vivales electorales, quienes venden las estructuras al mejor postor.

Vivimos una problemática de inseguridad, donde la omisión de las autoridades da más confianza a los que provocan la violencia para que continúen en su avance de apoderarse de la seguridad en regiones, colonias y comunidades. No existe por parte del Estado (país, estado y municipio) una estrategia para dar pelea al crimen organizado; de ahí la importancia que los electores vayamos a las urnas para poder darle la oportunidad a aquel candidato o candidata que nos garantice aplicar o crear las herramientas necesarias para que podamos tener una mejor calidad de vida.

El temor es generalizado, ya no se trata de ataques o eventos aislados, no se trata de un sector, todos los sectores de la sociedad son afectados por esta inseguridad, el comerciante que no sabe en qué momento llegarán a cobrarle derecho de piso, de no ceder, peligra su vida y la de su familia. Los cuentahabientes ya no pueden estar seguros ni en los propios bancos, pues ahí es donde los delincuentes aprovechas para cometer los robos. El transportista vive con el “Jesús en la boca”, pues no puede atinar quién de los pasajeros sacará un arma y empezará a asaltar a los usuarios. Las mujeres tienen miedo de salir por la noche, pues no saben en qué momento serán “levantadas” para asesinarlas.

Hay que ir a votar, pero con un voto razonado, no por los colores, por la tradición, por la moda de tal o cual partido, sino por la persona que garantice que cumplirá con lo que promete; pero principalmente por aquel o aquella que ame a Quintana Roo, y que no se preste para el saqueo y el mal gobierno.

SASCAB

Ayer tanto Jesús Alberto Capella Ibarra, secretario de Seguridad Pública en Quintana Roo, como el asesor del gobierno del Estado, Juan de la Luz Enríquez Kanfachi quisieron convencer al Ayuntamiento de Othón P. Blanco (Chetumal), de “las bondades del mando único”. Hasta el momento no pudieron con su cometido. El mensaje que se manda es que la estrategia de seguridad del gobierno del estado y sus asesorías, son fallidas.

Por Martín G. Iglesias