Ter­moeléctrica de Huexca, Mórelos

Sin Luz: ter­moeléctrica de Huexca, Mórelos

Columnas Políticas 6 de Marzo de 2019

El gobierno de López Obrador, a través de una de sus peculia­res consultas, respaldó la ter­moeléctrica de Huexca, Mórelos, aun cuando no hay todavía fecha de ope­ración. Esta termoeléctrica es impor­tante porque el resto de la inversión en energía está detenida.

La razón es que no hay certeza jurídica. 

El Presidente anunció el 9 de di­ciembre de 2018 que iba a lanzar un “rescate” del sector energético. 

Su plan, sin embargo, es reducir la producción en las nuevas plantas privadas,

“ya que la producción con gas fue un ne­gocio bien maquinado”. 

El objetivo es “ir hacia la autosuficiencia”, o sea, priorizar la producción de las plantas de la Comisión Federal de Electrici­dad, aunque sean viejas, ineficientes y contaminantes. 

Mercado de elec­tricidad en México

La apertura del mercado de elec­tricidad en México fue bastante limita­da. 

“La CFE ­me explica un ejecutivo de la industria;­ mantuvo varios mono­polios, entre ellos el de la transmisión y la energía doméstica así como el de las empresas pequeñas y medianas. Solo se abrió la electricidad al sector privado en grandes consumidores”. 

El monopolio es tan grande que los recursos que tiene la CFE no le al­canzan para cubrirlo. 

Los productores independientes de energía (PIE) so­lo pueden vender electricidad a los grandes consumidores, como mineras 

y siderúrgicas, o a la propia CFE, que obtiene así una mayor capacidad sin tener que hacer las inversiones que le restarían capital o incrementarían su ya elevado endeudamiento. 

Inversiones Privadas

Las inversiones privadas han su­mado unos 25 mil millones de dólares en los últimos años y han ayudado a mantener la generación que ha permi­tido el crecimiento del país.

También se han hecho posible también sustituir muchas de las plantas viejas, particularmente las de carbón o combustóleo.

México cuenta ya, gracias a la inversión priva­ da con una amplia red de termoeléc­tricas de gas de ciclo combinado más limpias y eficientes. 

En electricidad, sin embargo, las inversiones deben planearse con años de anticipación. Si bien las inversiones privadas permitieron crear un sufi­ciente margen de reserva operativo, el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) prevé una escasez de electri­cidad entre 2021 y 2022. 

Parece mucho, pero las plantas para cubrir la nueva demanda deben construirse ya. 

La inversión privada se ha parali­zado “porque no hay certeza jurídica ni de rumbo”.

Lopez Obrador

Los inversionistas priva­dos no pueden someterse a un sistema en el que, una vez que realizan una inversión que cumple con la ley, que­dan sometidos a consultas populares. 

Datos de Inversión

Una planta generadora de ciclo combinado puede costar entre 500 y 600 millones de dólares; las turbinas, que son la parte más cara, cuestan alrededor de 300 millones de dóla­res y deben ordenarse con años de antelación.

Si no hay certeza de que las instalaciones contarán con gas o recibirán permiso de operar, nadie invertirá en ellas. 

México necesita 7 mil millones de dólares anuales en nueva inversión simplemente para cubrir la demanda esperada. 

La CFE podría tratar de rea­ lizarla, pero esto representaría mayor deuda o un subsidio gubernamental que obligaría a mayores recortes en el gasto público. 

Lo lógico es que la CFE invierta en mejorar su infraestructura en los cam­pos en que sigue teniendo monopolio.

Las inversiones privadas también se necesitan, pero no se harán mientras persista la actual incertidumbre jurídi­ca.

Si el capital no se invierte en Méxi­co pronto, se irá a otros países. Y cuan­do se agote el margen de reserva, ya no habrá forma de generar suficiente electricidad para surtir la demanda. 

• CONFIANZA

Las críticas de los especialistas poco importan. El indicador de confian­za del consumidor registró su tercer mes al alza y alcanzó en febrero un máximo histórico de 48.81 puntos. 

Los consumidores sí le tienen confianza a López Obrador.