Urge investigación científica que apoye combate al sargazo: Semar

La Armada de México está trabajando de manera modesta con sus embarcaciones en la recolección del sargazo en alta mar, pero nada garantiza que sea lo mejor porque se trabaja sin una metodología definida, procedimientos o manuales que orienten su labor, reconoció el Contralmirante Enrique Flores Morado, director general de Oceanografía, Hidrografía y Meteorología de la Secretaría de Marina (Semar) y encargado del combate al alga marina.
Necesitamos conocer más sobre este fenómeno. Sabemos que estamos atendiendo los efectos  que esa no es la solución. Sin duda, tenemos que atender las causas, pero para eso necesitamos más investigación y saber más acerca del fenómeno.

Estamos faltos de investigación y esta es una oportunidad para todos aprendamos de eso, empezando por los centros de investigación, agregó. 
El funcionario aclaró que esa falta de conocimiento sobre esa plaga no se da sólo en México, sino en el mundo, pues no hay “un conocimiento totalmente adecuado o correcto en el que pudiéramos basarnos para hacer lo que estamos haciendo”. 
En realidad, sostuvo, lo que se está haciendo en México constituye un antes y un después para que muchos países puedan atender ese fenómeno. Nos falta mucho conocimiento, aunque trabajamos de manera coordinada con instituciones académicas y centros de investigación en la intención de conocer mejor el fenómeno y el porqué de su proliferación tan grande.

Estamos utilizando medios, un avión, un helicóptero y algunas embarcaciones de la Semar para dar seguimiento al fenómeno del sargazo, que es nuevo y no sólo afecta a Quintana Roo, sino a todos los países del Caribe.
Sin embargo, consideró que la estrategia del Gobierno Federal, que consiste en coordinar los esfuerzos de los tres órdenes de gobierno para que todos juntos enfrenten la situación, tiene su mayor fortaleza en el trabajo coordinado.
La solución no es sencilla, implica que todos estemos coordinados contra esta proliferación anormal del alga, señaló.
Según dijo, en condiciones normales el sargazo debe llegar, como en todas las playas, pero no en los volúmenes actuales, que están ocasionando una crisis.
El sargazo no se puede dejar en las playas, se tiene que levantar, porque al descomponerse tiene una grave afectación, principalmente en los arrecifes coralinos, explicó. 

También apuntó que el fenómeno “llegó para estar bastante tiempo con nosotros”, de modo que será necesario implementar infraestructura adecuada para hacerle frente en los próximos años. 
En realidad, en Quintana Roo, hay muchos vacíos tanto legales como ambientales que se deben cubrir ante este fenómeno, que nos está dando la oportunidad de aportar una solución que sería, incluso, un logro internacional.
La estrategia se basa en una matriz de 3×3, con dos aspectos fundamentales, el primero sobre la temporalidad y el segundo en cuanto a la localización. En el primer punto se proponen acciones a corto, mediano y largo plazo y, en el segundo, llevar al cabo acciones en playa, aguas someras y alta mar, explicó.
En una de esas esas nueve dimensiones entra la investigación, en mediano y largo plazo, en aguas someras y en altamar, pero también se tiene la intención de construir barcos diseñados para recolectar el sargazo en alta mar. En Ensenada hay un barco sargacero que no está activo y la intención es reactivarlo en un astillero de la Semar y traerlo al Caribe para que desarrolle sus actividades, continuó.

También aseguró que hay playas en las que, de manera natural, el sargazo llega y se va, de modo que no hay mucho qué hacer. Sin embargo, hay otras donde se debe estar atento porque el alga llega y se acumula, de modo que debe retirarse para evitar otros trastornos.
De acuerdo con la estrategia diseñada, prosiguió, el sargazo se debe recoger en el agua para evitar erosión en la playa al momento de limpiarla. Por eso es importante que las acciones de limpieza sean constantes y con la frecuencia necesaria.
Flores Morado dijo que un criterio aceptable es que una playa “limpia” sólo debe tener una franja de aproximadamente 30 centímetros del alga. Más allá de eso, implica que las autoridades municipales pongan en marcha acciones de limpieza.

Por INFOQROO