México pasa tranquilo prueba contra El Salvador

México jugaba a convencer. Era el debut en sociedad del técnico colombiano Juan Carlos Osorio al frente de la selección. Lo ayudó tener enfrente a la raquítica selección de El Salvador, mermada por algunas bajas y por una mala condición física. El Tricolor terminó arrollando a su rival con tres anotaciones en lo que en términos de boxeo se denominaría un round de sombra. El equipo de Primitivo Madariaga no pisó el área mexicana e hizo un solo disparo a puerta. Osorio y sus jugadores dejaron el campo sabiendo que deben trabajar la eficacia de la delantera rumbo al Mundial de 2018.

Durante la semana, Osorio había practicado la llegada por las bandas. Sus muchachos llegaron a la cancha del Estadio Azteca con la lección fresca en la memoria. México lanzó más de 30 centros durante el partido. Sin embargo, el gesto más repetido por los delanteros mexicanos —Carlos Vela, Oribe Peralta y Javier Chicharito Hernández— fue llevarse las manos a la cabeza tras las oportunidades desperdiciadas. Fue nuevamente el capitán, Andrés Guardado, quien fungió de motor del equipo, como lo hizo en la Copa Oro este verano. Un tiro libre suyo desde afuera del área abrió el marcador en los primeros minutos del encuentro. Es el primer gol a balón parado para la selección mexicana desde el marcado a Chile en septiembre de 2011, también obra del medio del PSV Eindhoven.

Alineaciones:

México: Moisés Muñóz, Luis Fuentes, Hugo Ayala, Héctor Moreno, Miguel Layún (Raúl López), Jesús Corona, Héctor Herrera, Andrés Guardado, Carlos Vela, Oribe Peralta (Raúl Jiménez), Javier Hernández (Juan Vázquez).

El Salvador: Henry Hernández, Juan Barahona, Roberto Domínguez, Henry Romero, Ibsen Castro (Santos Ortiz), Denis Pineda, Diego Chavarría, Gerson Mayén, Dustin Coreas, Yubini Salamanca (Pablo Punyed), Rafael Burgos (Jaime Alas).

Estadio Azteca.

El técnico colombiano aprovechó al débil rival para experimentar. Para probar la potencia del ataque conservó el perfil de sus laterales, pero cambió el de los volantes. Miguel Layún salió por la derecha a pesar de que se había forjado una reputación explotando su velocidad por la banda opuesta. No desentonó. Sin embargo, su actuación quedó diluida por la de Jesús Corona, su compañero en el Oporto. El jugador, conocido como Tecatito, incordió a los salvadoreños y logró redondear una gran noche poniendo una asistencia a Carlos Vela en el tercer gol mexicano.

Lo que más preocupó del equipo mexicano fue su falta de precisión dentro del área rival. Javier Hernández dejó escapar una oportunidad inmejorable de acortar la distancia que lo separa de ser el máximo goleador de la selección. Está a cuatro goles de Jared Borgetti. Ese fue el número de ocasiones que desperdició esta noche frente a la meta de Henry Hernández, que evitó que la goleada fuera más abultada. En el segundo gol de México, Héctor Herrera hizo un disparo desde fuera del área que el Chicharito pareció rozar, pero que el árbitro terminó por asignar al primero. Poco después fue relevado en el campo.(Agencias)